Hay cientos de diferentes formulaciones para elaborar jabón saponificado en frío y, cada cual, puede crear la suya propia si sabe cómo utilizar una calculadora de saponificación. Nosotros, a través de este blog, queremos aportar nuestro granito de arena y contribuir a la formulación de jabones naturales saludables y, además, biodegradables.
En esta ocasión, hemos formulado un jabón natural de azufre y neem saponificado en frío para tratar las pieles grasas y con tendencia al acné y las impurezas.
Es un jabón de uso tanto facial como corporal, al igual que el jabón que elaboramos en una entrada anterior para pieles normales y secas, y en la que incluíamos además un vídeo del procedimiento.
Con esta formulación es posible añadir una proporción de flor de azufre de 1 gramo por cada 100 gramos de aceite. En este caso, con un total de casi 800 grs de aceite, le hemos añadido una cantidad de 10 grs de flor de azufre a nuestra mezcla.
Ingredientes para un jabón con sobreengrasado del 10% a una concentración del 30%
Nosotros utilizamos la calculadora de saponificación de la página española de cómo hacer jabones.
300 grs de aceite de coco
400 grs de aceite de hueso de oliva
70 grs de aceite de ricino
TOTAL: 770 grs de grasas
Agua = 248 grs
Sosa = 106 grs
Incorporad la arcilla, el azufre, y el extracto herbal de Neem a la mezcla de aceites.
10 g de flor de azufre
15 g de arcilla caolín
15 g de polvo de Neem
En la fase final de adición, cuando el jabón ya esté trazado, añadiremos los siguientes ingredientes para hacer nuestro jabón corporal y facial aún más cremoso y emoliente.
1 TBSP (15grs) de miel
1 cucharada de aceite de ricino
Como este jabón despide un olor fuerte debido al azufre, nuestro consejo es que le añadáis entre 30-35 gotas de AE de romero que tiene un aroma fuerte y es, además muy purificante.
PROCEDIMIENTO:
Paso 1: Usando equipo de seguridad, pesad la lejía y el agua en dos recipientes separados.
Paso 2: Verted la lejía en el agua, sin dejar de remover, en un lugar bien ventilado. Dejadla enfriar mientras preparáis los aceites.
Paso 3: Pesad los aceites / mantecas y derretidlas.
Paso 4: Agregad los lodos y extractos a los aceites derretidos.
Paso 5: Una vez que la solución de lejía y los aceites se hayan enfriado a menos de 40 ºC, agregad la solución de lejía a los aceites y mezclad bien para trazar. ¡Aseguraos de usar gafas y guantes!
Paso 6: Una vez trazado el jabón, agregad la miel, la cucharada de aceite, y el AE de romero sin dejar de remover.
Paso 7: Verted el jabón en los moldes con ayuda de una espátula de silicona.
Paso 8: Esperad un par de días antes de desmoldarlo y cortarlo. Una vez cortado, es necesario que dejeis curar vuestro jabón durante un mínimo de 4 semanas.
Como se trata de una barra de jabón facial, es por eso que la hemos formulado con un sobreengrasado alto del 10% para que sea más emoliente.
Podemos utilizar nuestro jabón directamente en el rostro dejando que haga un poco de espuma y repose durante unos minutos como si de una mascarilla facial purificante se tratara. Después enjuagaremos y secaremos.
Si lo habéis probado, dejadnos vuestras ideas.