Si probáis esta crema os encantará la fluidez de su textura y su capacidad de hidratación.
INGREDIENTES:
¼ de taza de aceite de almendras
2 cucharadas de gel de aloe vera
5 grs de cera de abejas
1 cápsula de vitamina E
PROCEDIMIENTO:
Preparamos y pesamos los ingredientes que vamos a necesitar.
Previamente fundimos la cera al baño maría. Con el fuego apagado, pero aún caliente añadiremos el aceite de almendras y la cápsula de vitamina E revolviendo muy bien.
Sin dejar de remover, añadiremos el gel de aloe y, en último lugar, unas gotas de conservante (ESP o Leucidal), si es necesario, y también unas gotas de un aceite esencial de nuestra elección como los de lavanda, ylang ylang, geranio, o jazmín, si su aroma intenso no nos molesta.
Este será el aspecto final de nuestra crema que procederemos a envasar en un recipiente de vidrio para que conserve mejor sus propiedades.
Dependiendo de nuestro tipo de piel o del problema que queramos tratar, unos aceites nos favorecerán más que otros. Quizás hablaremos de esto en una próxima entrada.