EL BAÑO COMO MEDITACIÓN

EL BAÑO COMO MEDITACIÓN

Y manera de aprender a quererse y cuidarse.

A medida que nuestro mundo se globaliza y las culturas chocan, existe un enfoque creciente en las prácticas de la felicidad. Yoga, baños de sonido, círculos de tambores, meditaciones, la lista continúa. Estas prácticas pueden cambiar la vida. Pero es importante que tratemos las tareas diarias que podemos considerar “mundanas” como una oportunidad para crecer también. Darse un baño es una de esas tareas que, si se hace con intención, puede prepararnos para experimentar una mayor felicidad, amor propio y conexión.

Se ha demostrado que la meditación fomenta la felicidad en quienes la practican. Sin embargo, existen muchas formas de fluir que pueden tratarse como una meditación. Darse un baño con sales es una de ellas.

El agua, desde la antigüedad ha sido muy valorada por ser el líquido vital necesario para los procesos biológicos que hacen que haya vida en nuestro planeta, y hablando específicamente de los seres humanos, la necesitamos para poder realizar muchísimas actividades. Sin ella, simplemente, no podríamos sobrevivir. El agua es vital para los procesos a nivel celular que tienen lugar en nuestro cuerpo y, es bien sabido, que nuestras células están constituidas por un importante porcentaje de este líquido.

Este efecto relajante que el agua tiene sobre nuestro cuerpo nos ayuda a combatir el estrés y a dormir mejor, además de que disminuye algunas molestias que tengamos a nivel muscular, como dolores de espalda y piernas y también nos puede proporcionar un alivio del dolor en las articulaciones. Si bien, al darnos una ducha podemos sentir estos efectos, no hay nada como sumergirnos en una tina de baño para sentirlos al máximo.

Esto se debe a que al poder sumergir todo nuestro cuerpo en el agua, la temperatura actúa a nivel global y por la posición podemos estar más cómodos durante más tiempo. Este tipo de baño en hidroterapia recibe el nombre de baño de inmersión y a muchas personas les gusta utilizar sales de baño que además tienen efectos específicos sobre el cuerpo actuando desde la piel.

 

CÓMO DARSE UN BAÑO CON SALES TERAPÉUTICAS PROMUEVE UN SUEÑO MEJOR

La falta de sueño y el insomnio pueden causar una gran cantidad de síntomas negativos que incluyen impaciencia, ira, depresión, aumento de peso, disminución de la capacidad cerebral y comportamientos de mayor riesgo.

Una forma en que el baño puede ayudarnos a dormir mejor es mediante la termorregulación. La temperatura del cuerpo puede afectar a nuestros niveles de energía a lo largo del día. Los estudios han demostrado que un baño o una ducha caliente entre 30 y 90 minutos antes de acostarse eleva la temperatura central, lo que desencadena un enfriamiento drástico después y promueve un mejor sueño.

La iluminación de la zona de baño también es importante para la calidad del sueño. Según la National Sleep Foundation, la luz artificial después del anochecer puede suprimir la producción de melatonina, la hormona inductora del sueño, y hacer que sea más difícil conciliar el sueño y permanecer dormido.

También la revista “CuerpoMente” recoge esta idea: “Un exceso de luz en las horas previas al descanso o durante la noche, las emisiones de los móviles y los campos electromagnéticos, también pueden afectar a la producción de la hormona. El color de la luz influye en la secreción de melatonina. La luz azul, que corresponde a una onda con longitud corta, es capaz de suprimir la melatonina a intensidades bajas. Este tipo de luz domina en las pantallas led de móviles, tablets y televisores”.

https://www.cuerpomente.com/salud-natural/tratamientos/como-producir-tener-mas-melatonina_1676

Por tanto, es necesario que nos aseguremos de utilizar luces suaves y que permanezcamos alejados de teléfonos móviles y pantallas unas horas antes de irnos a la cama.

 

RUTINA DE BAÑO TERAPÉUTICO

Antes de comenzar nuestro baño nocturno, prepararemos todo lo necesario para irnos a la cama inmeditamente después. Por ejemplo, las toallas, productos para el cuidado de la piel, calcetines, pantuflas y pijamas. Cargaremos y silenciaremos el teléfono. Nos cepillaremos los dientes. En fin, todo lo necesario para salir del baño relajados y preparados para dormir mejor.

Incluso, durante el baño, es posible recitar mantras que nos ayuden a relajarnos y empoderarnos:

Me doy permiso para vivir más despacio.

Me entrego con pasión a este momento de relajación suprema.

Todo lo que necesito para ser feliz está en mí.

Merezco el amor que les doy a todos los demás.

Terminar el baño con un auto-masaje es una manera más de promover un mensaje positivo y de autoestima hacia nosotr@s mismos.

 

LA PREPARACIÓN DE LAS SALES DE BAÑO

Hoy en día es posible encontrar diferentes centros especializados en la venta de las sales de baño que cuentan con una amplia variedad de ellas; de manera que podemos elegir las indicadas para tratar diferentes afecciones, desde hongos en la piel e irritación, hasta inflamación de articulaciones y otro tipo de malestares.

Y también podemos preparar nuestras propias sales de baño como nos gusta hacer en nuestro blog😊

Para preparar un baño con sales se recomienda que llenemos tres cuartas partes de la bañera con agua caliente y que agreguemos una o dos tazas de sales para que se disuelvan. A continuación, podemos agregar un poco de agua fría para regular la temperatura del agua antes de sumergirnos.

Estas sales pueden estar preparadas con aceites esenciales que tienen diferentes propiedades relajantes y estimulantes, como la lavanda, romero, rosas, jazmín, manzanilla, almendra, menta, entre otros.

Te sugerimos que para evitar que tu piel se seque en exceso no tomes baños con sales más de dos veces por semana. Eso sí, puedes también preparar sales y bombas de baño con aceites deliciosos añadidos que evitarán este problema. Y, mejor aún, puedes untarte con tu aceite corporal favorito nada más salir del baño, antes de secarte. El agua contribuirá a que tu aceite se extienda de manera muy rápida proporcionándote un alto nivel de hidratación que contrarrestará la sequedad que puedan haber ocasionado las sales de baño.

A veces, simplemente un poco de aceite de oliva extra virgen, si es lo que tienes por casa, ya te puede resolver la cuestión dado que el aceite de oliva es emoliente y suavizante y, por su alto nivel de antioxidantes, resulta ser un buen aceite anti-envejecimiento.

Para elaborar sales básicas de baño tan sólo necesitaremos:

1kg de sal marina gruesa (es imprescindible que sea gruesa), sales del mar muerto, etc, o también es posible con una cantidad algo inferior de sales rosadas del Himalaya.

Opcional: *Colorante alimentario (podemos escoger el color que queramos pero deberemos echar bastantes gotas del mismo si queremos que tenga un poco color).

Aceites esenciales (son los que darán olor a nuestras sales minerales y aportarán cualidades terapéuticas. Escogeremos los que consideremos adecuados a la situación que queramos tratar, siempre es conveniente que no nos excedamos de unas 10 a 12 gotas).

Opcional: *Unos 10 gramos de flores secas (por ejemplo pétalos de rosa) u otro tipo de hierbas como flores secas de lavanda, raspaduras de limón o naranja, etc…

 

 

Sales de baño caseras paso a paso:

Lo primero que debemos buscar es un recipiente adecuado para el proceso de elaboración de las sales. Puede servirnos cualquier recipiente de cristal, propio de cualquier cocina, pero siempre con una tapadera.

En este recipiente añadiremos la sal gorda y poco a poco las gotas de colorante. Estas gotas se encargarán de dar este color tan particular que presentan las sales de baño. Cerraremos el recipiente y lo agitaremos hasta que la sal gorda, poco a poco, cuente con un color uniforme.

Una vez tenemos el color, es momento de añadir los aceites esenciales. Tras añadir las gotas de aceites esenciales debemos agitar nuevamente nuestro tarro para que la esencia se distribuya uniformemente por toda la sal.

Tras este paso será el momento de añadir nuestras flores secas o cualquier otro elemento aromático que queramos incorporar a las sales de baño caseras.

Dejaremos entonces que nuestras sales se sequen durante un par de horas aproximadamente. Para ello, las extenderemos en una bandeja.

Cuando estén completamente secas podremos introducirlas en un bonito recipiente de cristal y dejarlas a modo de decoración en el cuarto de baño. Además, si las utilizamos en el baño, (también es posible en una tina para los pies) disfrutaremos de unas sales de baño completamente caseras, con un aroma y una textura difícil de encontrar e interesantes propiedades cosméticas.

Como veis es un proceso bastante sencillo, además, también podemos elaborarlas como regalo, colocándolas en un bonito bote conseguiremos un presente de lo más original y artesanal.

Y si queremos preparar sales por sus propiedades saludables, en este apartado os aportamos tres diferentes recetas. Y es que, según los aceites esenciales y las hierbas que agreguemos a nuestras sales conseguiremos un efecto u otro.

 

PROPUESTA DE SALES DE BAÑO PARA MÚSCULOS CANSADOS Y DOLORIDOS

Si tienes los músculos cansados y doloridos, te proponemos la siguiente receta de sales de baño:

Lo que necesitarás:

Taza y media de sales de Epsom

1/2 taza de sal marina gruesa o sal rosa del Himalaya

1/2 taza de bicarbonato de sodio

6-8 gotas de Aceites Esenciales para aliviar el dolor muscular: Menta, clavo, gaulteria y helicriso

Colorante alimentario azul (opcional)

PROCEDIMIENTO:

Mezcla la sal de Epsom, la sal marina y el bicarbonato de sodio hasta que estén bien combinados. Agrega aceites esenciales y colorante (opcional) para jabón o alimentos y continua revolviendo hasta que el aceite y el color se distribuyan uniformemente. Guarda las sales en un frasco de vidrio grande.

Cuando sientas tus músculos doloridos debido a un fuerte entrenamiento, también dolores reumáticos, etc, puedes sumergirte en este baño de sales que te ayudará, sin duda, a recuperarte y dormir mejor.

 

PROPUESTA DE SALES DE BAÑO DESESTRESANTES Y RELAJANTES con limón y lavanda

Si estás estresado y no puedes dormirte, estas sales te ayudarán a lograrlo:

El aroma de la lavanda es calmante y relajante, y se usa a menudo en productos para combatir el insomnio y para aliviar el estrés. El limón irradia una fragancia limpia y fresca, y a menudo se agrega aceite de limón a los productos para el cuidado de la piel para reducir la aparición de imperfecciones y aumentar la circulación. ¡La combinación de limón y lavanda es un complemento ideal en el baño cuando queremos garantizar una noche de sueño reparador!

Lo que necesitarás:

3/4 taza de sal de Epsom

1 cucharada de sal rosa del Himalaya

1 cucharada de cogollos de lavanda secos (o 5 gotas de aceite esencial de lavanda)

La ralladura de medio limón mediano (o 5 gotas de aceite esencial de limón)

 

PROCEDIMIENTO:

Si lo deseas, puedes sustituir las flores secas de lavanda y el limón fresco por 5 gotas de aceite esencial de lavanda y 5 gotas de aceite esencial de limón. Los aceites esenciales son muy estables, por lo que nuestras sales tendrán una vida útil más larga sin los ingredientes frescos son sustituidos por aceites esenciales. Lógicamente, si vamos a utilizar las sales en breve, los ingredientes frescos le aportarán mucha más vida y frescor a nuestras sales.

Combina la sal de Epsom junto con la sal del Himalaya, luego mezcla cuidadosamente las flores de lavanda y / o el aceite esencial. Ralla el limón en las sales (o agrega aceite esencial de limón), remueve y luego deja reposar durante unos 20 minutos para que los ingredientes se mezclen bien.

Ya puedes almacenar tus sales en un frasco de vidrio y usarlas agregándolas al agua tibia del baño para disfrutar de un baño desestresante.

 

PROPUESTA DE BAÑO ANTIGRIPAL Y DESINTOXICANTE con jengibre y romero

La adición de romero seco y de jengibre en polvo a estas sales es muy adecuada en casos de infecciones respiratorias y fiebre, pues estimula la sudoración, ayuda a bajar la fiebre, y además aporta potentes principios antibióticos como son los gingeroles del jengibre y el carnosol del romero. Está indicada también en casos de bronquitis y tos.

Los baños de jengibre ayudan a aumentar la circulación, nos calientan en invierno y combaten nuestros dolores, resfriados o gripes.

A estas sales también es posible, en caso de que estemos verdaderamente resfriados, añadirles aceites esenciales de menta, eucalipto y alcanfor. Esta sinergia de aceites, junto con el romero y el jengibre, ejercerán una acción muy poderosa a la hora de bajar nuestra fiebre y potenciar nuestras defensas frente a los virus invernales.

Estas sales también son muy fáciles de preparar. Simplemente, nos preparamos un baño caliente y vertemos nuestro bote de sales ya preparadas, que contendrá:

1 taza de sal de Epsom (o sal marina)

1 cucharada de jengibre molido

De 2 a 3 cucharadas de romero seco.

De los beneficios antibióticos y descongestionantes del romero no es necesario explicar nada más, pues son por todos bien conocidos, es por ello que queríamos avalar los beneficios del jengibre como especia útil para “calentar” las dolencias debidas al frío invernal:

Beneficios potenciales del jengibre: Se ha visto que el jengibre es antiinflamatorio y útil para tratar las afecciones reumáticas y artríticas que se sienten mejor cuando se aplica calor. El jengibre ayuda a calentar y energizar el cuerpo cuando se tiene frío y por ello es también de gran ayuda con los resfriados y la gripe cuando los escalofríos y la congestión se encuentran entre los síntomas. Además supone un gran alivio del malestar estomacal, las náuseas y los vómitos de los virus estomacales.

 

 

Estos son solo algunos de los estudios científicos interesantes sobre el jengibre seco en PubMed:

Jengibre seco e inflamación (PubMed ID 23935687)

Jengibre seco más alto en antioxidantes (PubMed ID 26799205)

Además de docenas más de estudios sobre el jengibre (búsqueda en PubMed seco + jengibre)

Es importante que sepamos que si tenemos problemas de presión arterial, trastornos hemorrágicos o estamos tomando anticoagulantes u otros medicamentos similares, consultemos a un profesional de la salud antes de usar una gran cantidad de jengibre en dosis terapéuticas.

Como con toda medicina, los remedios naturales son altamente efectivos, pero no inocuos. Es conveniente no excederse en las cantidades y actuar prudentemente, sobretodo porque con un baño caliente nuestra temperatura corporal puede aumentar considerablemente y también el efecto estimulante de todos estos remedios.

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